Las plantas necesitan nutrientes esenciales del suelo para crecer y desarrollarse. Al igual que nosotros, si no obtienen suficientes nutrientes, puede afectar seriamente su salud.

Coincidiendo con el Año Internacional de la Sanidad Vegetal en 2020, reparamos cómo los 14 nutrientes esenciales benefician la salud y mejoran los rendimientos de las plantas.

Nitrógeno:

Es esencial para el crecimiento, metabolismo y salud de la planta. Es el principal componente de las proteínas.

 

Fósforo:

Es vital para el almacenamiento y transporte de energía, así como también para mantener la integridad de las membranas celulares de las plantas.

 

Potasio:

Participa en la activación enzimática, transpiración y transporte de los foto asimilados (producto de la fotosíntesis). Es fundamental en la regulación del agua durante las sequías.

 

Azufre:

Contribuye al crecimiento de la planta y la formación de los granos, mejora la resistencia al frío y a las enfermedades.

 

Calcio:

Es necesario para el mantenimiento de las membranas. Participa en la estabilización de las paredes celulares.

 

Magnesio:

Es elemental para la producción de clorofila, necesaria para la fotosíntesis y para generar tejido sano en las hojas.

 

Zinc:

Participa en la síntesis de la clorofila. Es importante para incrementar la resistencia de la planta a enfermedades y plagas.

 

Boro:

Es esencial para el metabolismo y transporte de los carbohidratos, para la lignificación de tejidos, para la síntesis de nucleótidos, respiración y en la viabilidad del polen.

 

Molibdeno:

Es usado por las plantas para reducir nitratos a formas orgánicas, así como también para los mecanismos de fijación biológica del nitrógeno en leguminosas.

 

Manganeso:

Juega un papel clave en muchas funciones de las plantas como la fotosíntesis la activación enzimática, la respiración y la asimilación del nitrógeno.

 

Hierro:

Es esencial para la síntesis de clorofila, a su vez funciona como catalizador celular para la división, la cual es fundamental para el crecimiento de la planta.

 

Niquel:

Es importante para la germinación de las semillas, la fotosíntesis, las funciones enzimáticas y el metabolismo del nitrógeno.

 

Cobre:

Es fundamental para el metabolismo del nitrógeno y de las hormonas a la vez que es necesario para una gran cantidad de actividades enzimáticas de las plantas.

 

Cloro:

Mejora la productividad de las plantas y también tiene un papel importante en la fotosíntesis.

 

 

Fuente: IFA International Fertilizer Association y Fertilizar Asociación Civil.