La mejora continua en el manejo en el cultivo de maíz conduce a mayor demanda de nutrientes. Nitrógeno (N), Fósforo (P), Azufre (S) y Cinc (Zn) lideran esta tendencia, sobre los cuales se han desarrollado y ajustado metodologías de diagnóstico regionales que permiten elaborar recomendaciones de fertilización.